Las diferencias atléticas entre hombres y mujeres tienen mucho que ver con características innatas determinadas por la genética y las hormonas. Estas características incluyen la altura, el peso, la masa muscular, la grasa corporal y la capacidad aeróbica. Como grupo, las mujeres no corren, saltan o nadan tan rápido como los hombres. Las mujeres también son más propensas a ciertos tipos de lesiones deportivas que los hombres.

Estrógeno

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Debido a los mayores niveles de estrógeno, las mujeres tienen más grasa corporal que los hombres. Las atletas más delgadas, como las mejores corredoras de maratón, tienen un contenido de grasa corporal de alrededor del 8%, en comparación con el 4% de sus homólogos masculinos. Además, el cuerpo de las mujeres es menos musculoso, pero sus articulaciones son más flexibles, lo que les proporciona una mayor amplitud de movimiento, una ventaja en deportes como la gimnasia. La pelvis femenina más ancha también afecta a la alineación y el movimiento de las extremidades. Los hombres tienen niveles más altos de testosterona, lo que les da una ventaja de rendimiento en otros aspectos.

Testosterona

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La testosterona permite a los hombres desarrollar músculos esqueléticos más grandes y corazones más grandes. Los hombres también tienen una mayor proporción de fibras musculares de tipo 2, que generan potencia, fuerza y velocidad. La testosterona también aumenta la producción de glóbulos rojos, que absorben el oxígeno, lo que da a los hombres una ventaja aeróbica aún mayor, informa la escritora del New York Times Gina Kolata en una entrevista con el Dr. Mark Tarnopolsky, investigador del ejercicio en la Universidad McMaster de Ontario.

Lesiones

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Las mujeres son más propensas a lesionarse en articulaciones como los hombros y las rodillas. Como los músculos del hombro son más débiles y los tejidos de soporte están más sueltos, la articulación es menos estable que en los hombres, informa el escritor Michael Lasalandra, en una entrevista con Bridget Quinn, médico del Centro Médico Beth Israel Deaconess. Además, el índice de lesiones del ligamento cruzado anterior, o LCA, un importante ligamento de la rodilla, es significativamente mayor en las mujeres que en los hombres. Entrenando adecuadamente y fortaleciendo los músculos de soporte, las mujeres pueden prevenir estas lesiones.

Récords deportivos

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La brecha de género en el rendimiento deportivo, tal y como se refleja en los registros de las competiciones olímpicas, se ha mantenido estable desde 1983. La diferencia media es de aproximadamente un 10% entre hombres y mujeres para todos los eventos. La diferencia media es del 10,7% para la carrera, del 8,9% para la natación y del 17,5% para el salto. Cuando el rendimiento mejora, las mejoras son proporcionales para cada género. Sin embargo, en deportes como el atletismo, una mujer en forma y bien entrenada puede rendir más que un hombre sin preparación. En las competiciones de tiro y equitación, donde el equilibrio físico y la concentración mental son esenciales, las mujeres pueden competir en igualdad de condiciones con los hombres.

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